‘Yarín’, un diálogo entre el flamenco y la tradición vasca

Siempre me han interesado las propuestas de Andrés Marín, por sus formas y estilo así como por su constante búsqueda de otras disciplinas musicales que intenta conectar con el flamenco, que es su base. Y eso es lo que más destacaría de la obra presentada anoche en el Teatro Central durante la Bienal de Sevilla 2022.
Yarín no es fusión entre el flamenco y la danza tradicional vasca, es un diálogo, un encuentro, un discurso, pero no hay superposición entre estas dos manifestaciones de distintos lenguajes. Y añadiría que, incluso, acercamiento entre dos pueblos y culturas distintas. Con una excelente e idónea iluminación, el espectáculo no consta de una sucesión de varios números o actos, es un cara a cara entre Andrés Marín y Jon Maya durante sesenta minutos con música en vivo y canto de Julen Achiary, que no cante, ya que lo único que se escuchó en este aspecto dentro del espectáculo fueron tres palos (taranta, cartagenera y verdial lucentina) interpretados por el bailaor sevillano (Premio Giraldillo del Baile 2020), algo habitual en sus propuestas, fruto de su gran afición y conocimiento del cante. Y, por cierto, aunque el pasado año en Itálica se pudo ver un bosquejo de la obra, ha sido un estreno.
Juan A. Rodríguez Juano para Flama
Reportaje gráfico: Claudia Ruiz Caro
Yarin. Baile: Andrés Marín y Jon Maya. Música en vivo y canto: Julen Achiary. Coreografía: Andrés Marín, Jon Maya y Sharon Fridman. Asistencia coreográfica: Melania Olcina. Asistencia de dramaturgia e interpretación: Sharon Fridman. Iluminación: David Bernués. Espacio sonoro: Xabier Erkizia. Vestuario: Ikerne Giménez. Lugar: Teatro Central. Fecha: Jueves 29 de septiembre. Aforo: Tres cuartos de entrada.