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El Festival Flamenco de Esch, en Luxemburgo… pasión por el flamenco desde 2006

28 diciembre, 2022

Tras cuatro ediciones en Málaga y, las dos últimas, celebradas en la Región de Murcia, la iniciativa  por primera vez llegó a Madrid entre el 1 y el 3 de diciembre de 2022. A la habitual programación de flamenco que repasó lo más granado del cante y del instrumento, este año, por primera vez, se presentó FlamencoEñe Off, en la Sala Marocco, donde se programaron artistas en los márgenes del género y que presentaron nuevas propuestas capaces de explorar los límites de la experimentación en el campo del flamenco. En la Sala Berlanga tuvo lugar la muestra de corte de flamenco tradicional.

De entre los programadores que se acercaron por Madrid para el proyecto organizado por Fundación SGAE, escogimos al representante de unos de los festivales con más solera del continente europeo, el de Luxemburgo, el Festival Flamenco de Esch, Miguel Betegón.

BC: ¿Podrías contarnos qué vínculo tienes con el festival?

MB: A finales de 1987 por motivos laborales llegué a Luxemburgo en donde he estado viviendo y trabajando 24 años. Al llegar allí, me encuentro  con una asociación cultural que se llama Circulo Cultural Antonio Machado que había sido constituida en los años 70.

En Europa, lógicamente, en la emigración española ha habido tres olas, la procedente  después de la guerra civil, emigración política;; una emigración económica de los años 60, 70 y una emigración, entre comillas, que vino a raíz de la adhesión de España a la Unión Europea. Sobre todo españoles a Bruselas y a Luxemburgo que es donde se sitúan las instituciones.

El Círculo Antonio Machado lo habían fundado los españoles y lo tenían un poco parado, recibían libros por ejemplo del Ministerio de Cultura español y poco más que reunirse pues eso, a jugar a las cartas, o ver el fútbol, lo típico de españoles que se juntaban para llevar mejor el tiempo. Y de ahí nos propusimos hacer un poco más de difusión de cultura española. Se organizaron conferencias o presentaciones de libros por un lado, exposiciones, debates, ciclos de cine o de teatro, música de jazz. Todo esto poco a poco.

El flamenco como todo el mundo sabe pues siempre tiene una acogida estupenda y se animó a ir programando cada vez más cosas de flamenco hasta que en el año 2006 organizamos el primer festival de flamenco del que llevamos ya 16 ediciones, 16 años.

BC: ¿Y el Circulo Antonio Machado sigue vinculado al festival?

MB: Sí, sí, es una colaboración del Círculo Antonio Machado y un espacio escénico que se llama Kulturfabrik, donde antes de empezar con el festival ya íbamos programando cosas.  También hemos programado en el Conservatorio de Música de Luxemburgo, en el teatro grande de la capital, que está dedicado a la ópera y al ballet. Ahí ha estado Rocío Molina, Israel Galván, Sara Baras… en fin un formato más grande. En el conservatorio estuvo Enrique Morente, Carmen Linares, esto hasta el 2006 que iniciamos el festival de Luxemburgo.

El festival lo hacemos en el espacio elegido por nosotros que más se adecúa al formato del festival, es un espacio más pequeño, un antiguo matadero de reses, es un proyecto parecido al que existe en Madrid, El Matadero, pero más pequeño. Aquí nos damos cuenta que el festival puede funcionar porque tiene aulas de ensayos, tiene una biblioteca, tiene un lugar donde los artistas pueden comer, cenar, tiene espacios al aire libre, tiene sala de exposiciones, etc. Y en los espacios al aire libre durante el festival se montan stands de comida española, en fin se convive mucho y la gente lo pasa muy bien. No es un teatro donde se representa la obra y los artistas terminan y se van, el público que va allí puede convivir con los artistas y los artistas entre ellos de las diferentes compañías que actúan durante el festival en días consecutivos.

BC: ¿Cuántos socios sois?

MB: Unos doscientos y pico, cuando yo me fui y por ahí sigue. El Círculo sigue organizando todo tipo de evento de difusión española, o latina algunas veces, pero fundamentalmente española.

BC: ¿Cuáles son los criterios de selección de artistas, de las compañías?

MB: Empieza claro por gustos personales nuestros. Dentro del Círculo Antonio Machado somos un grupito que se dedica a la organización del festival. Somos unos siete u ocho amigos que estamos dentro del Círculo Antonio Machado y que nos dedicamos a la organización del festival porque evidentemente, como ya te he explicado, dentro del círculo organizan diferentes géneros de la cultura y no todos aman el flamenco.

Queremos calidad que se adecúe a los presupuestos que podemos tener y cada vez se va conociendo más a las compañías, a los artistas que ya confían y  conocemos desde hace muchos años.

Por piropearnos un poco siempre hemos tratado muy bien a la gente, a los artistas y las compañías que nos visitan que vienen de invitados saben que no tenemos ninguna finalidad de lucro, todos nos dedicamos de forma voluntaria porque todos los que formamos el equipo tenemos nuestro trabajo. Yo aunque me jubilé sigo colaborando desde Madrid. Todos los artistas saben que lo que podemos pagar es lo que pongamos y no queremos lucrarnos en absoluto de nada hay mucha transparencia, mucha honestidad, ellos lo saben, somos muy puntuales pagando siempre justo después de la representación y se les trata muy bien porque al no tener ninguna recompensa económica nosotros queremos disfrutar de ellos cuando van y pasarlo muy bien con ellos. Eso hace que nos manden muchos proyectos a ver si los podemos hacer y que vayan contentos. Aunque desgraciadamente no podemos hacer autónomamente, todos supondría pérdidas.

BC: ¿Cómo os organizáis?

MB: La programación se celebra en espacios municipales, tanto el Kulturfabrik como el gran teatro de Luxemburgo, porque el festival se celebra en la segunda capital de Luxemburgo, Esch. El círculo se encarga de los hoteles, de las dietas, de los billetes… El espacio escénico se encarga de lo escénico, de los técnicos, de asumir las pérdidas que podemos tener que como te dije siempre hay, no cubrimos gastos porque es caro. Los cachés, hoteles, transportes, etc. Los artistas son caros porque queremos llevar artistas de calidad y con un aforo de 250 personas o 300 escasas, aunque llenamos, no se cubre gastos.  Hacemos también cursos, alguna exposición, alguna charla.

Begoña Castro para Flama

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