Francisco Carrasco Carrasco, Curro Malena para el arte jondo, nos dejaba este fin de semana a los 77 años, tras una larga enfermedad. La capilla ardiente fue instalada en el teatro municipal de su pueblo, Lebrija, el pasado domingo. El municipio de Lebrija ha declarado tres días de luto en memoria de quien fue Hijo Predilecto y Medalla de Oro de este baluarte del flamenco sevillano; siendo uno de sus cantaores más señeros. Precisamente, la Diputación de Sevilla le concedió la semana pasada la Medalla de Oro de la provincia. Curro fue un gran cantaor que comenzó a destacar a finales de los años 60 a raíz de ganar el primer premio en el Concurso de Antonio Mairena. Y grabó por aquel entonces su primer disco, nada más y nada menos que con el mismísimo Niño Ricardo.

Por otro lado, debemos también sumarnos al pésame de otro artista flamenco. En esta ocasión, gaditano. Chiquito de Cádiz, Servando Domínguez Carrión, nos dejaba a los 92 años en su ciudad natal, Cádiz. Artista polifacético que desarrolló su actividad flamenca en Sevilla y Barcelona principalmente. Una figura que desbordaba esa alegría y ese soniquete tan particular de la tacita de plata. El alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’, ha comentado en su cuenta de Twitter que el cantaor era «una persona de estilo inconfundible, conocido y muy querido por sus vecinos y vecinas» y ha destacado que ha contribuido a forjar «la identidad de esta ciudad».

Desde este foro, con sentido pesar, mostramos nuestras condolencias y pésame a familiares y amigos, ya que han perdido a una figura que, en cierta forma, todos amamos y respetamos desde el arte que todos compartimos.