La historia del flamenco en Huelva viene caracterizada por el fandango de la capital y de su provincia, muy diversa y amplia. El flamenco en Huelva arranca a través de los fandangos locales más bien bailables. Esta frase me la contó Pepe Borrero de Alosno; y es la pura realidad. Cuando el folklore cae en manos de profesionales lo adaptan a su manera y pierde todo el sabor de su nacimiento. Para explicar la grandeza del fandango – como palo flamenco – hay que recurrir a los pueblos. Corriendo el riesgo de que si ese pueblo que investigamos no tiene la suerte de tener un cantaor flamenco o una cantaora de renombre nunca será reconocido, por eso se dice – en el mundo del flamencno – fandangos de Rengel, de Rebollo, del Comia, de Paco Toronjo, del Gatillo de Valverde, de la Conejilla de Alosno… y así estariamos hablando de personajes flamencos que lo han propagado a los cuatro vientos. Pero si no tenemos artistas populares que lo den a conocer por los publicos de fuera de Huelva, siempre serán fandangos desconocidos, y la importancia de las letras son muy de la tierra y el entorno donde se cantan. Y si no fíjense en esta letra:
Fandango en que no se nombra
ni a la mujer ni al caballo
desengañarse señores
que ni es de Huelva ni es fandango
Manuel López Martín El Málaga. Presidente de la Federacion Onubense de Peñas Flamencas (El Fandango).